La ventana de fuera está empañada. Miles de gotitas minúsculas se adhieren al cristal formando extraños ríos de humedad que imitan a la piel de cebra. Esta imagen es más interesante que lo que hay detrás, un cielo blanco y gente gris con el carácter agriado por el frío. Puede que sean así, independientemente del clima. Con suerte será una forma de mimetismo.
A mí no me afecta el frío. Si estoy apática no es porque duela respirar, igual que no lloro por imitar a la lluvia.
1 comentario:
A mí tampoco. :-)
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